Yanardag - ardiente milagro de la naturaleza en Azerbaiyán

Una montaña inusual se encuentra cerca de Bakú, a la que deben acudir los turistas que visitan la capital de Azerbaiyán. Y algunos viajeros de Irán e India van a Azerbaiyán únicamente para visitar este lugar. Esta montaña se llama Yanardag, que significa "montaña en llamas". La montaña realmente arde, con fuego real.

La cuestión es que en el territorio de la península de Absheron, en el que se encuentra la ciudad de Bakú y sus alrededores, hay un gran depósito de hidrocarburos. El gas natural, ubicado en las entrañas del monte Yanardag, encontró una salida, donde se encendió. Esta montaña, más bien, es una colina, una altura de poco más de 100 metros. Y la ignición del gas natural ocurrió no hace diez, ni cien y ni siquiera hace quinientos años. Según la leyenda, el fuego ha estado ardiendo aquí durante miles de años.

Y si nos referimos a los hechos reales relacionados con la edad de la montaña en llamas de Yanardag, entonces podemos mencionar el viaje de Marco Polo. El famoso italiano que se dirigía a Persia visitó Bakú y fue testigo de este fenómeno natural, sobre el cual escribió en sus memorias. En el siglo XIII, cuando Marco Polo estaba en estas partes, docenas de esas luces brillaban aquí. Ya en esos días lejanos, Azerbaiyán estaba produciendo petróleo, que la gente usaba para iluminar habitaciones y calles, así como una cura para enfermedades de la piel.

Es interesante que el fuego natural no se apague durante la lluvia y el mal tiempo, y tampoco se extienda más allá de la pendiente por donde escapa el gas. El olor a quemado se siente claramente en el aire. Y no muy lejos de la colina en llamas hay un pequeño volcán de lodo.

La montaña en llamas de Yanardag es un lugar de peregrinación para los fanáticos del zoroastrismo. Para los seguidores de esta religión, el fuego es un elemento sagrado, por lo tanto, la península de Absheron con sus colinas en llamas ha sido popular entre los zoroastrianos desde la antigüedad. En la península, incluso se conservó el templo zoroástrico Ateshgah del siglo XVII, cuya construcción también se asoció con el punto de salida de la combustión de gases.

Llegar a esta llama eterna natural es bastante simple. Después de pasar aproximadamente media hora, puede llegar desde la estación de autobuses de Bakú en autobús regular. Según los recuerdos de las personas que visitaron este increíble lugar, el monte Yanardag se ve especialmente espectacular al atardecer y por la noche.