Un valiente fotógrafo tomó increíbles fotografías de tiburones en las olas.

Sean Scott vive en la ciudad australiana de Gold Coast. Durante más de veinte años ha estado filmando un entorno magnífico: playas paradisíacas, vida marina, paisajes fenomenales.

En unas recientes vacaciones familiares en una de las regiones occidentales de Australia, siguió el pronóstico de las olas y se dirigió a Red Bluff Beach, uno de los mejores lugares para surfear en el mundo. Sean planeaba simplemente tomar fotos del preocupante océano cuando vio algo raro: docenas de tiburones blancos hicieron un verdadero festín frente a la costa. Con la ayuda de una cámara y un avión no tripulado, Scott inmortalizó estas increíbles escenas desde diferentes ángulos. El resultado fueron disparos increíbles en aguas cristalinas.